La Biofísica Cuántica es la ciencia que aúna los avances de la Física Cuántica en relación con el estudio de los sistemas biológicos. En las últimas décadas surge la necesidad de incorporar la teoría cuántica en el estudio de los seres vivos. Sobre todo porque la vida se expresa de forma sumamente eficiente. Además, la materia viva está caracterizada por un estado altamente organizado. La coherencia biológica es un fenómeno cuántico importante que determina dicha organización con una sincronización implícita.
‘La biofísica cuántica se basa en un concepto ondulatorio de la materia’
En el transcurso de los últimos años, desde las investigaciones de la Biofísica Cuántica, se ha constatado que existen efectos cuánticos en el funcionamiento de los seres vivos. Se empiezan a conocer cada vez más dichos fenómenos cuánticos, tales como la fotosíntesis, la acción enzimática, la herencia genética, la orientación de las aves a lo largo del campo magnético terrestre y la emisión biofotónica celular.
Precedentes de la Biofísica Cuántica
Los primeros estudios dentro de la Biofísica Cuántica están estrechamente relacionados con el proceso de la fotosíntesis. Está estudiado que la transmisión de energía tiene una eficacia próxima al 100%, muy superior al actual rendimiento de las placas solares. Esto es posible, ya que el electrón excitado que es transferido a través del laberinto clorofílico lo hace a través de múltiples rutas simultáneamente, en concordancia con el Principio de Superposición.

La fotosíntesis es un proceso estrechamente relacionado con la Biofísica Cuántica
¿Qué es el Principio de Superposición?
Este es un principio que refleja lo extravagante que es el mundo cuántico. Antes de realizar cualquier medición el sistema cuántico puede estar en múltiples estados a la vez, como, por ejemplo, estar en dos lugares simultáneamente. Este principio es la base de la computación cuántica.
Importancia de la física cuántica
‘La Física Cuántica es una asignatura imprescindible en la biología y en las ciencias de la salud.’
Hasta ahora, en términos generales, el rol de la Física Cuántica en la biología está presente en su vertiente más simple. Sería el caso del reconocimiento molecular, la acción de las proteínas y el ADN, las fuerzas de Van der Waals, los orbitales moleculares discretos y la estabilidad de la materia. La cinética de las reacciones químicas, el balance ácido-base, los procesos de difusión etc. también son tratados en ausencia de un nivel de organización superior. En general, a excepción de algunos casos, la noción de una jerarquía de subsistemas dentro del sistema biológico, y cualquier visión del organismo como un conjunto suele estar ausente.
Durante los últimos años se están descubriendo efectos cuánticos no-triviales tales como la coherencia y el tunelamiento cuántico. La coherencia es fruto de una cooperación, de una sincronización entre las diferentes partes de un sistema. Esto solo puede suceder desde una visión ondulatoria de la materia donde las partes actúan al unísono. Con anterioridad a estos estudios, se pensaba que eran imposibles estos estados de coherencia cuántica en ambientes de temperaturas relativamente elevadas, como es la temperatura corporal. Asimismo el tiempo de persistencia de dichos estados coherentes es bastante mayor a lo que se pensaba inicialmente.
La coherencia cuántica es clave para explicar cómo los electrones pueden pasar barreras de energía impenetrables desde una visión corpuscular. Esto tiene una repercusión directa sobre los procesos metabólicos en el organismo.
‘Según la Física Cuántica cualquier entidad física es a la vez partícula y onda. Esta aparente paradoja explica muchos fenómenos en el mundo físico. Un ejemplo sería los procesos de combustión termonuclear en el interior de las estrellas.’
La Biofísica Cuántica como elemento de comunicación
La biocomunicación en el organismo necesita claves cuánticas como, por ejemplo, la coordinación de trillones de átomos a través de patrones ondulatorios. Hay propiedades estrictamente ondulatorias tales como la longitud de onda, la frecuencia de vibración, la fase o la polarización que son fundamentales en los procesos biológicos. Además, los aspectos más sutiles del ser humano se expresan en este nivel ondulatorio de la materia. Las investigaciones dentro del estudio de la materia viva están arrojando claves importantísimas de cómo funcionan los mecanismos básicos asociados a la conciencia. Existe un dominio cuántico no observable que hace de nexo de unión entre el organismo biológico y la conciencia.
Los modelos de campo y las teorías del campo de punto cero aportan las herramientas necesarias para trazar el puente entre mente y cuerpo. Además, los dominios cuánticos explicarían la interconexión fundamental en el organismo, con otros organismos y con el entorno.