El pasado sábado 2 de junio tuve el placer de conocer personalmente al investigador Alberto Borrás Gabarró en su vivienda, una masía del siglo XVIII; la edificación con algunos torrejones de defensa me hacía recordar los tiempos del físico Newton escribiendo su Principia Mathematica con la luz tímida de algunas velas. Me recibió delante de una pequeña puerta situada a un lateral de la casa. Me sorprendió agradablemente la energía, el entusiasmo, la buena presencia de Alberto Borrás a sus 85 años de edad.
Durante unas tres horas aproximadamente me estuvo hablando apasionadamente acerca de algunas de sus investigaciones durante su larga trayectoria profesional, a la vez que yo le hacía cuestiones sobre algunos temas leídos de su obra. Farmacéutico y químico por la Universidad de Barcelona, se especializó en microbiología industrial. Trabajó profusamente en la rama láctea de la industria alimentaria. Fueron sus investigaciones sobre el agua las cuales me llevaron a visitarle. Me habló de cómo vitalizar el agua (teniendo en cuenta que el agua del grifo además de tener muchos elementos químicos nocivos para una buena salud, es agua que ha perdido casi o totalmente la energía vital presente), cómo obtener un precipitado altamente energético a partir de agua de mar (denominado materia Ormus) que luego puede servir como fertilizante natural o como energizante diluido en agua, cómo potenciar el agua con cristales de cuarzo, etc. Durante un período me comentó que estuvo experimentando con el orgón o fuerza vital terrestre, concretamente con el cañonrompenubes (cloudbuster) de W.Reich, pruebas que acabó por abandonar por sus implicaciones y por potenciales peligros. Lo que sí me confesó es que funcionaba a la perfección. Sin duda alguna.
Alberto Borrás posee varias patentes y múltiples publicaciones en torno a temas tan numerosos como los del aprovechamiento del suero lácteo, los relacionados con el agua de mar, con la vitalización del agua dulce, los de las energías sutiles, tanto terrestres, telúricos, cósmicos, como los relacionados con la conciencia humana. Incluso entiende de tecnología de onda escalar y ondas de torsión, como de dispositivos para el aprovechamiento de la energía del Campo de Punto Cero, llamada Energía Libre, o la energía del hidrógeno, líneas de investigación que obviamente no interesan a la élite mundial. En un momento dado, le pregunté su opinión acerca del cambio de conciencia, este punto de inflexión del cual nos habla por ejemplo la cosmología maya, para finales de este año 2012. Me comentó que lo realmente importante es nuestro pensamiento y sentimiento acerca de este evento, no tanto el evento en sí, sino de cómo vamos a manejar toda la situación en conjunto: empezando por nosotros mismos, nuestro entorno, nuestro país y todo el planeta en conjunto. Quizás si pensamos que algo fundamental ocurrirá por estas fechas, es bien probable que acabe sucediendo si hay suficiente gente sintonizada con este pensamiento. Una opinión que comparto plenamente con él.
Asimismo, también por interés personal, le pregunté acerca del affaire UMMO. Él, junto a los ya fallecidos Antoni Ribera y Rafael Farriols a los que también tuve el placer de conocer en persona, entre algunos otros destinatarios, recibieron unas cartas procedentes de una supuesta civilización extraterrestre, los ummitas. Dado que poseo algunos documentos al respecto, que me facilitó Antoni Ribera en su casa de SantFeliu de Codines hace algunos años, me intrigaba saber si cree que realmente sus remitentes son seres procedentes de otro planeta. Su respuesta fue clara: hasta fecha de hoy se sigue recibiendo información. Me habló de algunas intervenciones telefónicas bastante peculiares de las que fue objeto. Podría ser bien posible que fuera un montaje cuidadosamente elaborado por la CIA o por otro bureau de investigación secreta, pero no deja de ser curiosa toda la amplia información de índole científica de alto nivel, tecnológica, biológica, cosmológica, moral, etc. que caracterizan la mayor parte de la documentación entregada por parte de estos supuestos seres parecidos a los humanos, los UMMOEMMII.
Espero que pronto pueda volver a compartir algún rato de conversación con Alberto Borrás sobre muchos temas interesantes sobre los cuales no nos dio tiempo de hablar. Agradezco su buena disposición que tuvo por recibirme y dedicarme una buena mañana de su tiempo.
Teresa Versyp, 3 de junio 2012.
